12 septiembre 2019 
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Si hay un lugar en Madrid por el que parece que no ha pasado el tiempo, es el restaurante Lhardy. Se trata de uno de los locales más longevos de la capital; fundado en el año 1989, ha sobrevivido a dos repúblicas, dos dictaduras y una guerra civil – de hecho, durante la contienda, una bomba cayó sobre el edificio de la Carrera de San Jerónimo, donde se halla el restaurante desde hace 180 años. Nada parece que pueda con este clásico del panorama gastronómico madrileño, que cuenta con una tienda y con un restaurante con un comedor principal, el isabelino, y seis salones privados. Su decoración aún conserva el sabor y aroma del siglo XIX, por lo que adentrarse en Lhardy es un viaje al pasado así como una experiencia culinaria de lujo. Destacan en su interiorismo sobre todo las lámparas, que en sus inicios comenzaron siendo de gas para luego ser eléctricas, tal y como las conocidos hoy en día.
Algunas curiosidades
Casa Lhardy fue fundada por Emilio Huguenin, aunque casi todos le conocen como Emilio Lhardy, en referencia al restaurante que le dio la fama. Fue el primer restaurante en España que separó las mesas, el menú tenía un precio fijo, las cuentas se hacían por escrito e incluso fue pionero en aceptar reservas por teléfono. Vamos, lo que hoy en día nos parece normal en un restaurante, Lhardy fue el primero en implantarlo en nuestro país. Una moda que, por supuesto, el propio Lhardy trajo de Francia, donde la restauración pública había comenzado a funcionar de esa manera 50 años antes.
Cuentan que en los salones de Lhardy han ocurrido secretos que nadie conoce. Y no es para menos, si tenemos en cuenta que por sus salones han ocurrido alguno de los hechos más importantes de la historia de España: por ejemplo, Niceto Alcalá Zamora fue nombrado Presidente de la II República en el Salón Japonés y también frecuentó sus salones el General Primo de Rivera para sus reuniones como ministros. Por supuesto, los monarcas Isabel II y Alfonso XII también tuvieron a bien pasearse por el lugar; no obstante, ellos lo hicieron de incógnito.
El local sigue conservando la ubicación en la que abrió cuando se fundó el restaurante, lo que es ligeramente diferente es la decoración. Poco después de su estreno, en los años 1880, el decorador Rafael Guerrero fue el encargado de cambiar el interiorismo y lo hizo siguiendo el estilo Segundo Imperio o napoleónico, y es la que ha perdurado hasta hoy. El material que más destaca de toda la decoración son los elementos de madera de caoba, que fueron traídos desde Cuba precisamente para esta ocasión.
¿Cómo llegar?
El restaurante Lhardy se encuentra en una ubicación privilegiada de Madrid. Para llegar a él puedes hacerlo desde la parada de Sol (líneas 1, 2 y 3 de metro y C-3, C-3A y C-4 de Cercanías) y la de Sevilla (línea 2). De ahí puedes llegar al local, sita en la Carrera de San Jerónimo, 8 (28014 Madrid) en pocos minutos. Para reservar, puedes hacerlo a través de su página web, que puedes consultar aquí, o llamando a los siguientes teléfonos: +34) 915 213 385 y (+34) 915 222 207. Igualmente puedes ponerte en contacto con ellos en el siguiente mail: lhardy@lhardy.com. El restaurante Lhardy también cuenta con una tienda de productos típicos.
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