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Una manta térmica para piscina es la mejor forma de aumentar el confort en tu zona de baño. Esta es una solución rentable debido a la durabilidad y las ventajas que te aportará. Existe una gran variedad de mantas térmicas para piscina en función de las preferencias del consumidor. Los cobertores de doble burbuja están desarrollados tecnológicamente para una mayor vida útil y dependiendo de su color y características te ofrecerán una serie de beneficios.

Ventajas que te aportará una manta térmica para piscina:

• Aumentar la temperatura del agua hasta en 10ºC
• Prevenir la evaporación de agua con su correlativo ahorro
• Evitar el crecimiento de algas en tu piscina
• Evitar que caiga suciedad en la piscina permitiendo ahorrar en químicos para el mantenimiento
• Economizar costos y reducir la huella de carbono

Estas son algunas de las características más significativas de este tipo de cubiertas, en función del modelo. Mediante la captación de energía solar, el material aumentará la temperatura del agua (hasta en 10º en el caso del modelo Sol+Guard de GeoBubble), y mantendrá la temperatura para que cuando quieras disfrutar de un baño, tan solo tengas que destapar el cobertor. Cada vez son más las personas que se decantan por este tipo de accesorios para su piscina debido al valor añadido que aporta, y al ahorro que supone, aunque siempre surgen algunas dudas antes de realizar la inversión.

Preguntas frecuentes sobre cobertores de burbujas para piscina

¿Cuándo pongo la manta térmica en la piscina?

La manta térmica para piscina ha de permanecer sobre la superficie del agua todo el tiempo que no se esté usando la piscina. De esta forma, actuará captando la radiación solar para que disfrute de la temperatura que desea cuando se bañe.

¿Qué durabilidad tienen estas cubiertas?

Las mantas térmicas de Geobubble  tienen una durabilidad de 7 años o superior si se hace un uso adecuado de estas.

¿Puedo dejar la cubierta puesta durante el invierno?

No es recomendable dejarla durante el invierno ya que no todos los modelos soportan las inclemencias meteorológicas adversas, pudiendo deteriorar el material de la manta térmica o reduciendo su vida útil. La mejor opción para tapar la piscina durante el invierno es un cobertor de PVC.