¿Cómo se realiza una limpieza de fin de obra y que incluye?

¿Debes hacer una limpieza de fin de obra? Hacer una mejora en casa o la oficina siempre deja mucho que limpiar. Todo trabajo de construcción exige que se realice una limpieza al final. Este es el broche de oro para que toda remodelación se luzca como debe ser.

Esta última labor antes de utilizar el espacio es absolutamente necesaria para garantizar que todo ha quedado perfecto. Sin embargo ¿qué incluye este tipo de limpieza? Te lo explicamos todo a continuación

¿Qué es una limpieza de fin de obra?

Una limpieza de fin de obra es la acción o trabajo que tiene como propósito desaparecer los desechos y el sucio acumulado luego de acabada una obra de reforma. El objetivo es dejar todos los espacios higiénicamente dispuestos para utilizarse con seguridad.

Una reforma puede generar múltiples residuos y tipos de suciedad. Por ejemplo, puede haber bastante polvo, aserrín, arena dispersada, restos de hormigón, gotas de pintura, partículas de plásticos o cartón, entre otros.

Como el trabajo puede llegar a ser bastante, existen empresas especializadas para hacer una limpieza de fin de obra. Estos profesionales cuentan con la experiencia y las maquinarias necesarias para eliminar todos los residuos mencionados de manera eficiente. Además, se aseguran de no dañar el acabado de las mejoras realizadas.

Por dónde empezar

Inicialmente, los encargados de la limpieza realizan una inspección exhaustiva de las instalaciones. Es importante la evaluación de los acabados en las diferentes superficies como las paredes, el suelo, el techo e incluso los cristales.

De este modo, al tener en cuenta las características del entorno que se debe limpiar (tanto la parte interior como exterior), entonces la empresa genera un presupuesto. Así, se podrá especificar el tipo de equipo, materiales y herramientas que se van a necesitar para realizar la limpieza.

Considerando el presupuesto, es importante fijar una fecha con plazos establecidos para la elaboración del trabajo. Todo esto para una mejor planificación de las funciones que van a desempeñar los trabajadores en el área.

Además, adjunto al presupuesto, se debe especificar los productos y maquinarias específicas que se van a utilizar durante la limpieza. Por ejemplo, aspiradoras para el polvo, ceras para pulir los pisos y detalles de ese estilo.

¿Qué incluye una limpieza de final de obra?

Dependiendo del tipo de obra que se haya terminado, los productos y las maquinarias van a variar. Sin embargo, en líneas generales podemos presentarte un listado de tareas que incluye una limpieza de final de obra:

1. Eliminar polvo, arena o limaduras de las superficies. Implica barrer, aspirar, sacudir y remover partículas del suelo, paredes, objetos, ventanas y puertas.
2. Eliminar manchas de pintura. Para ello, es necesario utilizar disolventes, fregonas e incluso espátulas.
3. Sacar restos de hormigón o yeso. Implica utilizar productos más fuertes y maquinaria más específica para este trabajo. Es necesario trabajarlo con bastante detalle para no dañar las superficies.
4. Limpiar restos de silicona o pegamento. Incluye el empleo de espátulas y acetonas o disolventes. 
5. Desinfección de los baños. Este tipo de limpieza implica el empleo de químicos para la desinfección de los azulejos y limpieza de todas las áreas de los baños y duchas.
6. Pulido de los pisos. Generalmente, luego de una remodelación, muchos pisos se opacan o rayan, por lo que implica el uso de pulidoras especiales y ceras para volver a dejar relucientes todos los pisos.

Como te habrás dado cuenta, la limpieza de fin de obra es una tarea fundamental para garantizar que toda la remodelación ha quedado perfecta. Además, debe ser realizada por expertos que sepan realizar las labores con el cuidado necesario para no echar a perder la remodelación.